Nuestro sitio utiliza cookies.

En cumplimiento de la Directiva 2009/136/CE se informa que el presente sitio web utiliza cookies propias para la presentación de los servicios adecuados a sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación. En caso de que deshabilite el uso de cookies en este sitio web, no podrá acceder a todos los apartados del mismo. Si continua utilizando el sitio web sin deshabilitar el uso de cookies, entendemos que presta su consentimiento para el uso de las mismas. Para deshabilitar el uso de cookies en esta página y/o obtener información completa del tipo y finalidades de las cookies utilizadas consulte el siguiente. AVISO LEGAL.


95 | 71
Liga Endesa - Jornada 4. Jueves, 16 de octubre de 2003 a las 20:30
Pabellón Fuente de San Luis

Pamesa Valencia 95 - Unicaja 71. Crónica.

La resistencia malagueña duró apenas un cuarto. Poco a poco los valencianos fueron encontrándose más sueltos en la pista, ayudados por la mejor defensa que hasta ahora han realizados y por su acierto desde la línea de tres puntos.

El Unicaja no fue rival. Sólo el excelente primer cuarto de Carlos Cabezas hizo pensar que podría plantar cara al Pamesa, pero el paso de los minutos puso en evidencia sus problemas, que fueron bastantes, entre otros, la floja aportación anotadora de Louis Bullock y Risacher.

El encuentro comenzó sin tregua. El equipo local castigó de la mano del pívot griego Dimos Dikoudis los problemas físicos del conjunto malagueño bajo los aros, pero el desparpajo de Carlos Cabezas, once puntos en el primer cuarto, permitió al Unicaja minimizar los daños.

Las rotaciones cambiaron el partido. El descanso de Cabezas y Walter Herrmann apagó a los visitantes y, en cambio, el Pamesa creció con cada cambio que introducía Paco Olmos.

Con un quinteto formado por jugadores que habían comenzado el encuentro en el banquillo, el equipo valenciano amplió de manera considerable su renta (44-30, m.16).

Mención especial mereció el italiano Alessandro Abbio, en su reaparición ante la afición local tras ocho meses lesionado estrenó su casillero de puntos con un triple desde más allá de medio campo cuando creía que se acababa el cuarto y aún quedaban más de treinta segundos para que esto sucediera realmente.

El paso por los vestuarios sólo consiguió acentuar estas tendencias. El Pamesa, dirigido de manera excelente por Alejandro Montecchia, se encontró cada vez más cómodo en la pista, todo lo contrario que su rival.

El Unicaja se descompuso. Su defensa hacía aguas, sus problemas bajo el aro minaron la moral de los jugadores de Paco Alonso y en ataque sólo las individualidades de Mous Sonko suponían un problema para los locales (77-47, m.32).

El partido acabó sin más historia, convertido en un festival de efectividad del Pamesa desde la línea de tres puntos al que se unió en algunos momentos Herrmann para maquillar la sequía de los suyos.

Fuente: ACB.COM